Es una inflamación tanto el estómago como el intestino delgado. La misma puede ser causada por virus el 70% bacterias y parásitos.
Es una de las infecciones con mayor frecuencia en toda América por lo que debemos conocerla, diferenciarla y así evitar complicaciones innecesarias. La misma generalmente se presentan con decaimiento del estado general, dolores musculares seguidos de diarrea, vómitos, cólicos intestinales, fiebre.
¿Qué medidas debemos tomar ante estos síntomas?
En pacientes menores de 2 años, ancianos e inmunodeprimidos lo mejor es acudir lo antes posible al centro de salud más cercano ya que los mismos corren mucho mayor riego de sufrir deshidratación y complicaciones; el resto deberá enfocarse en una buena hidratación con bebidas hidratantes, suero orales, jugos frutales y dieta astringente. Evitar la automedicación con antiespasmódicos y antidiarreicos; si los síntomas no mejorar en 48 hs o vómitos imposibilitan la ingesta de líquidos o diarrea en más de 6 oportunidades en menos de 2 horas acudir al médico lo antes posible.
¿Como la prevenimos?
La mejor prevención es el lavado de manos frecuente, cocinar bien los alimentos y la buena higiene de los mismos.
Dr. Mario Feltes
Médico de Familia