¿Cuándo fue la primera vez que escuchó sobre la existencia el CMB?
En 1971 vine al seminario para estudiar y como seminarista podía consultar aquí. La primera vez fue como paciente por una complicación de gripe.
¿Desde qué año se encuentra trabajando en el CMB?
En el CMB tuve dos etapas, en el 1973 y en 1974 como ayudante de capellán, luego salí. Luego de 18 años volví en marzo del 1991 cumpliendo así 26 años en la Institución. Sigo manteniendo el mismo concepto de Capellanía: Estamos para asistir espiritualmente.
¿Por qué eligió el camino de trabajar en la capellanía?
Elegí porque descubrí que trabajamos con la persona en momentos de enfermedad, sufrimiento y crisis. Los ayudamos para enriquecer lo espiritual, acá es un aprendizaje y crecimiento multidisciplinario
¿En qué consiste el trabajo de un capellán?
En escuchar a pacientes, funcionarios. Asistencia en consejería y visitar a los enfermos. Trabajamos con la espiritualidad de las personas no con su religiosidad.
Los capellanes ¿se capacitan para su labor? ¿De qué manera?
Sí, claro.. Es una especialización en Capellanía, en este caso, Capellanía Hospitalaria.
¿Qué cree Ud. es lo más difícil en su tarea?
Primero, diría que es acompañar a los familiares cuyos seres queridos acaban de fallecer. Y segundo, el asesoramiento a personas, matrimonios y familias en diversas crisis.
¿El capellán recibe a veces rechazo o desinterés del paciente? ¿De qué forma cree que un Capellán debe lidiar con esto?
Si, claro, y creo que tiene que aceptar el rechazo en primer lugar. Las personas tienen derecho de aceptar o no la ayuda. Jesús mismo fue rechazado por como manejaba el ministerio.
El capellán debe respetar la apatía de algunos pacientes / familiares sobre los valores espirituales. Pastorear al que quiere ser pastoreado. No tomarlo a pecho… puede ser a consecuencia de una mala experiencia previa, o muchas veces por fanatismo religioso, porque creen que el capellán se acerca para proselitismo religioso o para cambiarle de religión, y no es así.
¿Por qué decide retirarse? ¿Qué proyectos de vida tiene en adelante?
Porque como misionero en marzo cumplo 45 años y he dado lo mejor para Dios, esta Institución y la sociedad. Ahora me voy a dedicar a… Primero, ser chofer particular de mi señora. Segundo, voy a ser gerente de familia. Y tercero, disponer mi tiempo para gente nueva. Asistir como predicador o como conferencista sobre temas familiares, matrimoniales, etc.
¿Qué mensaje daría a los pastores que quedan?
Bueno… es afirmar y consolidar el Ministerio de la Capellanía y seguir progresando para ofrecer una asistencia integral a los pacientes, familiares, funcionarios y toda persona que se acerque en busca de ayuda.
¿Qué mensaje dejaría a los pacientes del CMB con respecto a los capellanes?
Que ellos son nuestra prioridad en la atención espiritual. Que el Capellán va para escucharles y darles aliento. Para orar por ellos y con ellos, acompañarlos en los momentos de dolor, dificultad.
¿Qué es lo que más ha disfrutado de su labor en el CMB?
Es la presencia de Dios obrando en la vida de la personas y en la mía también. Ser una pieza importante de este equipo médico. En forma personal estoy muy agradecido a Dios y a mi familia que me apoya… al Director General del CMB que apoya 100 % el Ministerio de la Capellanía. Hemos trabajado muy bien desde el 2001. El CMB enriqueció mi vida en lo espiritual, física, intelectual y económicamente…. Estoy MUY AGRADECIDO.
El Pastor José Lezcano Sanguina está casado con Alicia. Juntos tienen tres hijos: Ada Esther (36), José Emilio (34), Benjamín (24); y dos nietos, Sofía Abigail (9) y Facundo Benjamín de (5). En su tiempo libre disfruta de cortar el pasto del jardín, ver futbol (liberteño de corazón), leer libros de John Maxwell sobre liderazgo y escuchar música de todo tipo: clásica, cristiana, folklórica y mariachi.