Muchos se rascan la cabeza cuando se les dice que deben tener una alimentación sana mientras otros están más que seguros que saben que es comer sano.
Mientras creamos que un almuerzo de carne con arroz con queso o fideos blancos con salsa blanca son un almuerzo nutritivo, estamos lejos de saber sobre la alimentación y menos aún de una alimentación sana, a pesar de que estos platos resulten apetitosos al paladar.
Pero ¿dónde están las fibras dietéticas en estos alimentos? ¿Proveen de vitamina A, C o antioxidantes o ácidos grasos esenciales? Alimentarse de forma sana tiene su costo. No esperes que lo bueno te lo entreguen regalado. Invertir en alimentación saludable es mucho menos costoso que pagar las consecuencias de las transgresiones alimentarias. Es entonces que resulta interesante recordar la frase “Es mejor prevenir que curar”
Te dejamos algunos puntos a tener en cuenta:
- En primer lugar, una alimentación saludable incluye adecuada hidratación. Multiplica tu peso por 35ml y esa es la cantidad de agua que debes tomar en el día. ¡Sin agua no hay vida!.
- Es esencial y vital, desayunar. Jamás se debe obviar el desayuno pues es y debe ser la comida más importante del día y al menos 50% de lo que deberíamos consumir tendría que mantener su estado natural, es decir al hablar de frutas y verduras consumirlas crudas para conservar el mayor porcentaje de nutrientes, tanto de vitaminas como minerales.
- Un desayuno común está compuesto por café o cocido con leche y panificados pero lo ideal sería incluir frutas frescas y quizá algún licuado de semillas como lino o chía o sésamo, que son super alimentos y dan mucha saciedad por lo que es recomendable incluirlos en la dieta diaria. Un grave error nutricional es comer lo mismo en todos desayunos. En la variedad está la riqueza.
- En el almuerzo debes incluir siempre una ensalada de verduras crudas de al menos tres diferentes verduras de distinto color, y reducir la ingesta de alimentos que tengan cantidades exageradas de grasa como las frituras o embutidos. Recordar que la distribución en el plato del 50% de verduras crudas el 25% de Carbohidratos y el resto de proteínas.
- Parte de una buena digestión es la masticación adecuada y esto se logra masticando aproximadamente 30 veces cada bocado permitiendo que la saliva forme parte del alimento y asi llegar en condiciones óptimas al estómago para la siguiente etapa de la digestión.
- La merienda debe ser hecha en especial si la cena suele ser muy tarde como después de las 20:00 hs, esta puede estar compuesta por frutas, yogurt de preferencia descremados o frutos secos en pequeña cantidad para los que no cuenten con mucho tiempo.
- Cuanto menos comas en la cena, mejor será el descanso y con más energía tendrás al despertar. Podés hacer la prueba por 1 semana y vas a notar la diferencia.
- Una alimentación saludable no está completa sin una rutina de ejercicios de al menos 30 mins. diarios o 150 mins. semanales además de un descanso reparador de 6 a 8 horas.